Más de 20 000 jóvenes cubanos

Más de 20 000 jóvenes cubanos han tenido la posibilidad de ingresar a carreras universitarias como estímulo en el cumplimiento del Servicio Militar Activo.

 

El teniente coronel Ernesto González Sosa, segundo jefe de la sección de Reclutamiento del Ministerio de las Fuerzas Armadas de Cuba (MINFAR), informó que en las ultimas dos  décadas esa cantidad de jóvenes  han podido realizar estudios universitarios  como médicos, estomatólogos, periodistas, arquitectos, ingenieros y en otras especialidades, por haber tenido un comportamiento exitoso en el cumplimientote su deber en la preparación para la defensa de la Patria.

 

En una audiencia pública, en la Ciudad de Morón, al norte de Ciego de Ávila,  como ejercicio pleno de la democracia, hubo un encuentro entre jóvenes que llegan a los 16 años de edad, sus padres, profesores  y miembros de la Comisión Permanente de la Defensa de la Asamblea Nacional del Poder Popular, para explicar las características del reclutamiento, condiciones de vida en las unidades militares y posibilidades de estudio y trabajo una vez concluido el Servicio Militar Activo (SMA).

 

También estaban presentes exreclutas que trasmitieron sus experiencias en el SMA, y lo que ese tiempo contribuyó a su formación como hombres, combatientes y  revolucionarios.

Con el triunfo de la Revolución cubana en enero de 1959 y las primeras medidas que pusieron fin al latifundio con la Primera Ley de Reforma Agraria,  la intervención de las empresas privadas, la conversión de los cuarteles en escuelas y el desarrollo de una campaña nacional de alfabetización, desde los Estados Unidos, su gobierno y los que huyeron de Cuba, comenzaron a organizar y desarrollar diversas agresiones contra el país.

Atentados, lanzamientos de bombas en centrales azucareros, la agresión militar por Playa Girón, y otros ataques con  la muerte de niños, mujeres, ancianos y ciudadanos en general, motivó que en  1963 se aprobara la Primera Ley del Servicio Militar Obligatorio por tres años, la que en 1973 se transforma en la segunda ley, como Servicio Militar General y en 1994, la Asamblea Nacional del Poder Popular en Cuba aprueba la Ley de Defensa Nacional  que  en uno de sus acápites establece la Ley del Servicio Militar Activo por dos años.

 

El cumplimiento del Servicio Militar a lo largo de estos años de Revolución cubana ha permitido que miles de jóvenes adquirieran  una exitosa preparación militar con el objetivo de defender las conquistas de la Revolución, y no como fuerza intervencionista y agresora como ocurre en  los Estados Unidos, Gran Bretaña o Israel cuando son llamados al ejército.

 

Los que en Cuba cumplen con el Servicio Militar Activo tienen la posibilidad, según su comportamiento, de reducir su estancia en el ejército y  poder optar por una carrera universitaria y  hasta se les garantiza la preparación en un oficio y un empleo.

 

Ante las amenazas de intervención militar por parte del Gobierno de los Estados Unidos contra Cuba y las agresiones de grupos contrarrevolucionarios desde Miami, como Alfha 66,  el Servicio Militar Activo se convierte en una de las vías más eficientes para hacer realidad el pensamiento  del Presidente del Consejo de Estado de Cuba, Fidel Castro, de que  La defensa de la Patria, el más grande honor y el deber supremo de cada cubano.